Seguro que tú, o tó, o ese de más allá habéis probado los yakisobas esos instantáneos, esos que venden en los super a poco más de un euro o esos ya más caros si son de importación. Sabéis de qué hablo, ¿verdad? Bueno, bien, si creíais que habíais comido yakisoba solo por haber abierto un bote, echarle agua hirviendo y esperar unos minutos, siento deciros que no, lo siento, no habéis comido yakisoba, habéis comido algo rico, con el mismo nombre, pero no era esto que os enseño hoy.
"¡Qué rico! ¡Quiero más! ¿Queda de eso, mamá?" Esto se ha escuchado hoy en casa, con lo que los botes esos serán comprados muy de tarde en tarde, cuando me entre la pereza o tenga temas literarios que me lleven mi tiempo. En fin, que os animéis y los hagáis, están de vicio extremo.
INGREDIENTES
Fideos soba
Carne de cerdo picada muy fina, mejor tipo carpaccio el corte, pero de cerdo.
Repollo
Un huevo por persona
Salsa yakisoba
Jengibre rosa encurtido
Sichimi
PREPARACIÓN
Cocemos los fideos con el tiempo que nos marque el paquete, estos míos se han cocinado en 4'
Los pasas por agua fría para cortar la cocción y reservas.
Cueces los huevos de 3 a 4' sacas del agua hirviendo cuando haya pasado el tiempo y los metes en agua con hielo. No queremos que se sigan cocinando en su propio calor.
Troceamos la carne y el repollo y con una cucharadita de aceite de sésamo doramos la carne en un sartén antiadherente, cuando veamos que ha cambiado el color, añadimos el repollo troceado, damos unas cuantas vueltas para que se le quite lo rígido, y añadimos salsa yakisoba al gusto.
Metemos de nuevo los fideos al sartén y damos vueltas hasta que hayan cogido el color de la salsa.
En el plato, a la hora de servir el yakisoba, colocas el huevo, el jengibre rosa encurtido, espolvoreas con sishimi y ya puedes empezar a comer con ganas.
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