Crema de Mejillones

No os podéis hacer una idea de lo liado que tengo el mes de Mayo, creo que a veces no tengo tiempo ni para respirar, os cuento un poco porque sé que sabréis poneros en mi lugar. El primer domingo, el día de la madre, el día siete, el cumpleaños de mi pequeña, el día ocho su primera confesión, el día nueve, el aniversario de mi boda y el día diez la comunión de mi pequeñaja y el día dieciocho mi cumpleaños... y encima tengo que cocinar, y hacer fotos, y subir las recetas de mis comiditas, vamos que  sarna  con gusto no pica... pero mortifica. ¡TIEMPO POR FAVOR!

menos mal que siempre tengo alguna receta en la mochila fácil, rica y rápida como esta cremita rica de mejillones que espero que os guste tanto como a mí (¿os he contado alguna vez que soy adicta a los mejillones? seguro que sí, seguro que cada vez que pongo alguna receta con ellos os lo cuento).

INGREDIENTES

1Kg de mejillones frescos

1 Puerro pequeño

1/2 Cebolleta no muy grande

2 Dientes de ajo

1/2 Tomate

1 Chorrete de coñac

Un poquito de nata líquida

PREPARACIÓN

Quitamos barbas, lapitas y demás impurezas de las cáscaras de los mejillones y reservamos.

Picamos el puerro, la cebolleta y el ajo en brunoise y en una cucharada de mantequilla con un poquito de aceite (para que la mantequilla no se queme), lo pochamos. Cuando veamos que las verduras ya están blandas, añadimos los mejillones y el coñac. Flambeamos los mejillones encendiendo el coñac con un mechero. Removemos hasta que se apague el fuego. Cubrimos con agua y dejamos hervir diez minutos más o hasta que los mejillones que no se abrieron en el flambeado lo hagan.

Sacamos la carne de los mejillones y reservamos alguno para la decoración. Pasamos todos los demás junto al caldo formado y las verduras por la batidora y por último añadimos la nata líquida (no demasiada, solo un poco para dar un poco más de cuerpo).

Podemos espolvorear con cebollino o con un poco de perejil picado, pero así, tal cual, está riquísima.